Título: Un día, un perro
Autora: Gabrielle Vincent
Editorial: Zendrera Zariquiey
ISBN: 9788484181980
Sinopsis: Los maravillosos trazos en carbón de Gabrielle Vincent nos acercan de
una forma sorprendente a las emociones más profundas. Un día, un perro
nos hace tomar conciencia de la importancia de querer y cuidar de los
animales que nos hacen compañía, y la responsabilidad que tenemos de no
abandonarlos a su suerte.
Creo que este es el primer álbum ilustrado que comento, y eso me llena de orgullo y satisfacción :D.
No, en serio, desde hace unas semanas, tengo una lista inmensa de títulos de libros infantiles o álbumes ilustrados (que no necesariamente van dirigidos a un público infantil, sino todo lo contrario), los cuales quiero encontrar y leer. Hace poco, en la librería de viejo a la que soy asidua, encontré “Un día, un perro”, y decidí que tenía que ser mío sí o sí.
Os voy a poner algunas fotografías, para que podáis observar como son las ilustraciones y los trazos que las forman. En esta ocasión, el álbum no tiene texto que lo acompaña, pero las imágenes son tan descriptivas, que observarlas en silencio es lo que va a ayudar al lector a reflexionar y comprender la gravedad de la situación.
La historia trata sobre un perro que es abandonado por sus dueños. A raíz de ahí, se desencadenan una serie de hechos, donde el animal, sin comprender lo que le sucede, tendrá que desenvolverse. Dentro de la crudeza de la historia, hay un mensaje final positivo o esperanzador.
Este álbum en cuestión, se puede utilizar para trabajarlo con niños, para concienciar desde pequeños del problema que tan grave que sufren muchos animales. También los centros de acogida, asociaciones o veterinarios podrían difundir esta historia.
No voy a contaros más el rollo, simplemente, deciros que si tenéis el momento de acercaros a este o a otros álbumes ilustrados, dadles una oportunidad, ya que la mayoría os sorprenderían para bien.
¡Os lo recomiendo! :P
Tan solo leer el argumento, ya me hace llorar. Soy muy sensible en lo que respecta a los animales, y me pone muy triste y me indigna toda la crueldad que se lleva a cabo con ellos, como si fuesen un simple objeto que le pertenece a los seres humanos. Hay que concientizar a la gente y darnos cuenta de que los animales son seres vivos que sienten como nosotros y que tienen el derecho a ser libres y vivir una vida digna. Por esa razón, creo que está bueno este tipo de obras que ayudan a difundir otro modo, más compasivo de ver a los otros. Así que lo coy a buscar.
ResponderEliminarBesos.
Este tipo de lecturas me tocan la vena, me da una pena, una lectura dura pero que bueno que tenga un final feliz.
ResponderEliminarAy, yo este tipo de libros no puedo leer
ResponderEliminarUn beso^^
Sufro bastante con este tipo de lecturas (o películas), detesto cualquier maltrato o abandono hacia los animales. Aun así, comentas que el mensaje es positivo, y las ilustraciones son sencillas, pero muy bonitas. No descarto darle una oportunidad.
ResponderEliminar¡Un beso!
Parece un libro precioso pero también no apto para sensibles, aunque comentas que tiene un final positivo, ains. Hace nada vi la película The plague dogs y aún tengo el corazón encogido... cuánta crueldad para un animal tan noble y leal.
ResponderEliminar¡Besos!